Bueno, sigo chinchando un poco con el rodeo.
Hasta ahora (luego presentamos el Non-Plus-Ultra que acaba de salir), el modelo estrella de Citizen, última evolución de la saga The Citizen a la que me he referido en el post anterior, era éste.
AQ4030
La estética no es muy diferente de la que GaStan los vecinos de enfrente. La construcción es en titanio, pero con un tratamiento propio DuraTec con el que afirman que es 10 veces más resistente al rayado que el acero. Y sí, el pulido es el famoso Zaratsu artesanal. Otro paralelismo con los de Morioka es que éstos relojes también los hacen en un pequeño estudio en Iida, Nagano, los “Super Meister” o más experimentados y mejores trabajadores de la firma.
Ya sabemos que a los japoneses les gustan las esferas especiales. Curiosamente, el texturado viene porque la esfera está hecha de un papel especial, el Tosa Washi, confeccionado artesanalmente, y que era tradicionalmente usado para hacer puertas y paredes de papel, además de linternas.
El calibre es un EcoDrive A060, del que vemos su fino acabado, y que por el otro lado tiene una célula solar debajo de la esfera. El reloj es termocompensado, chequeando la temperatura cada minuto, para ajustar su precisión si es preciso.
Como característica curiosa, si no recibe luz, pasado un tiempo, sus agujas se ponen en modo “ahorro de energía” y van a las 12, pero el reloj mantiene el tiempo, y, cuando vuelve a recibir luz, desplaza las agujas para que muestren la hora correcta.
Otra de sus características es que tiene calendario perpétuo.
Hasta el momento, el “The Citizen” no tenía competidor en el mercado. Oficialmente, el Grand Seiko 9F declaraba unos conservadores 10 segundos por año, aunque sus usuarios refieren mucho menos. Pero Longines ha resucitado también viejas siglas, VHP, con un termocompensado con calendario perpétuo en su popular colección Conquest… y también refiere 5 segundos por año. Puede ir aún más a la flotación… encima cuesta la mitad.
Citizen no puede dejar que los suizos le mojen la oreja…
Y, a lo que iba desde el principio. Citizen ha presentado su calibre 0100, con el número dado por el centenario de la firma, y un nuevo The Citizen.
Pero lo más remarcable e increíble es su precisión… 1 segundo por año. También su precio, como decíamos arriba, “asequible a todos los ciudadanos”, 16,800 dólares de nada, que todos tenemos en el bolsillo.
…aunque ya es un pelín tarde, y la presentación y unos cuantos detalles la dejo para mañana.:bye: